"La fe es dar el primer paso, aun sin saber cuantos escalones quedan por subir"
No recuerdo exactamente donde o cuando escuché aquella frase por primera vez; sólo se que quedo para siempre grabada en mi cabeza y que hasta el día de hoy sigue allí.
Desde que que tengo memoria, me han hablado de la fe... algunos, en términos religiosos; otros, como un valor; un sin fín de terminologías y descripciones sobre lo que es o lo que puede ser... Y, en realidad, yo no busco defirnirla, no es mi intención, no por el momento. Sin embargo, me da curiosidad saber como es que trabaja la fe. Tener fe en que algo va a pasar, que de pronto las situaciones cambiarán; fe en Dios, en uno mismo, tantas frases que se utilizan con la palabra fe.
Cuando me pongo a pensar, me doy cuenta que yo también he sido partícipe del uso de la palabra fe en un millón de ocasiones -serias o no. Y es allí donde nace mi pregunta de qué significa tener fe en algo, o por qué si con tanta frecuencia utilizo aquella palabra, ni siquiera se lo que es con exactitud.
Mi madre me dijo una vez que la fe puede mover montañas (la verdad cada vez que me lo decía, en mi mente se dibujaba una montaña siendo movida por una letra "F" con ojos chinitos y pies gigantes). No creo que sea tal como mi mente lo diseñó, pero algo de cierto debe haber, tal vez sea que uno mismo crea su fe y la utiliza para que ciertas cosas cambien, mejoren o pasen... O sea que es algo que ya existe en todos nosotros, una suerte de creación colectiva, o de verdad aceptada, que nos ayuda a llegar a nuestro fin.
Sea lo que sea, la fe está presente, ¿no?. Y, es muy cierto lo que esa primera frase mencionada dice. No se puede saber lo que vendrá en un futuro, ni lo que pasará de aquí al día siguiente o en diez años, pero con un poco de fe quizá podamos seguir nuestro camino, una vida. Claro que, siempre me permitiré dudar sobre lo qué trama la fe.
